Película basada en la obra de Dashiell Hammett, que define el desarrollo del cine negro. Para muchos considerada su mejor exponente y una de las mas grandes de todos los tiempos. Equiparada a cualquiera de las consideradas imprescindibles con mayúsculas. Desgraciadamente, patrimonio de los que no consideran lo añejo como bandera de lo trasnochado.
Quizás no tan conocida como otras, pero dotada de una ambientación y puesta en escena que traspasa la pantalla. Haciéndonos participar de un relato que juega con nosotros, al igual que un niño con su juguete preferido.
De alguna manera llevandonos por caminos tortuosos, en los que se recrea creando un ambiente propicio para que las insinuaciones. Sean mas poderosas que lo que vemos. Donde cualquiera de sus fabulosos diálogos, esconde una trampa o una velada pista sobre las verdaderas inclinaciones de nuestros protagonista o secundarios. Aquí casi tan importantes, como los principales.
Elegante y cautivadora, transpirando un pesimismo y derrota que casan perfectamente en una corte de seres depravados.. Rastreros y marchitos, moviéndose siempre en busca de un beneficio calculado. Que mas que nada, parece quimera inalcanzable. Pero aun así, perseguida por seres marcados por la diosa fortuna con su gélida y temida….cruz negra
Fatalismo que se pone al servicio de un relato esmerado en el que nuestro queridisimo Sam spader se mueve entre bambalinas. Cautelosamente deslizándose por un mundo donde nadie es quien parece. Donde la codicia, la mas bajas pasiones y la traición son la moneda común que todos guardan para enseñar en el momento adecuado.
Mujeres fatales, villanos con carisma, detectives misogenos y duros como el granito. Todo en un calidoscopio que gira de la mano de un un maestro del genero como John Huston. Agitándole tras ese toque de elegancia para construir, probablemente su mejor película. Lo que ya es decir mucho y mas viendo el panorama actual.
Una trama que atrapa y gira constantemente, acompañada de unas interpretaciones magistrales donde Bogart y Mary Astor como mujer fatal. Brillan como iconos y si por ella se podría perder un reino. El lo ganaría para después ver como se desliza entre sus dedos.
Perfectamente escoltados, por un genial Peter lord como villano de tendencias homoeróticas. Sin olvidar un elenco de secundarios que simplemente cautivan en su riqueza de detalles. Creando entre todos una trama que absorbe y nos lleva en volandas, hasta un final en el que el destino muestra sus cartas mas irónicas.
Y diríamos todo esto para que,… Sencillamente para crear una de esas obras que perduraran en el tiempo, ajenas a vaivenes y modas pasajeras. En definitiva, cine con mayúsculas y como dice Bogard en una de las geniales frases de esta película…Hecha, con el material del que se hacen los sueños….